20 de febrero de 2008

las manos pequeñas no giran el mundo,
no lo cambian...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No es tu sexo lo que

en tu sexo busco

sino ensuciar tu alma:

desflorar


con todo el barro de la vida

lo que aún no ha vivido.



Leopoldo María Panero

Arena y espuma dijo...

Las manos desnudas quizás no, siempre te puedes ayudar de un lapiz para cambiarlo.

Hacia mucho que no me pasaba por aquí, pero ya me ves, al parecer he tenido el impulso repentino de escribir las cosas guardadas. Veo que tu has continuando expresando con el mismo sentimiento que un dia me animó a abrir mi blog, ya casi habia olvidado la existencia de estas paginas, me alegro de haberme reencontrado con ellas.
Intentare seguir escribiendo mientras dure este golpe retomado de inspiración, que seguramente se desvanecerá enseguida.

Nos vemos Niña Perdida.