26 de mayo de 2007

Tinta

Se puso de puntillas. Los tacones rojos volaban a ras del suelo. El chico de las letras blancas le agarraba fuerte la cintura, ella le rodeó el cuello con sus alas de mariposa (aunque en realidad era un hada). Se besaron los ojos, las manos llenas de magia y el Fin se pronunció en los labios.
Su mirada de almendra comenzó a inundarse de agua. Agua dulce, siempre había tenido sonrisa de azúcar.

-¿Por qué lloras?

-Lloro de felicidad, hoy todo es perfecto.

La chica de la boca frambuesa volvió a engañarse a si misma. ¿Era feliz?
Lloraba porque había vuelto a dejar su corazón al descubierto y sabía que las letras blancas lo llenarían de tinta roja y él escribiría su nombre en MAYÚSCULAS.La tinta es permanente,mancha...

Tenía
miedo.

12 comentarios:

amandine dijo...

Los besos que saben a almendras dulces siempre logran quedarse en el recuerdo.
Los sueños con días perfectos son una constante en las hadas que, al descubierto, dejan su corazón en la esquinita de un parque.

El miedo...acaba desapareciendo.

.JL. en los afelios dijo...

Mis letras,
tal vez negras y sucias,
se han aclarado un poco al leerte,
nada se pierde,
todo se transforma.

Besos rojos y dulces de domingo.

Irene dijo...

¡Feliz cumpleaños!

Lo siento.
Te quiero.

chica de las preguntas dijo...

te encontré entre rojos, palabras pegadas a la espalda, bocas de frambuesa y lágrimas de felicidad. Me gustó.... mucho. Ya no dejaré que vuelvas a perderte. besos

Prigkinissa dijo...

Ay... El miedo a ser felices y luego sufrir. A algunas también nos acosa ese miedo. Pero hay q saber dar prioridad a la felicidad y los buenos momentos. Hay que aprender a ser felices sin condiciones.

Anónimo dijo...

a veces me pasa que subo unas escaleras sin rozar los peldaños con los pies. En el últimp escalón el miedo de paraliza y me doy la vuelta sin asomarme siquiera a la puerta.

ese miedo me recuerda al que hablas en tu bello post.

Un beso

Alice ya no vive aquí dijo...

La vulnerabilidad de alma siempre genera vértigos, incertidumbre y miedos.

Pero es sin duda maravilloso saber que los besos todavía tiene la fuerza de dejar el corazón al descubierto, latiendo con más fuerza, sintiendo con cada célula...

adictaacruzarenrojo dijo...

Uñas, labios, semáforos, corazones, tinta, miedo...todo rojo pasión...todo por algo, todo merece la pena...
Me ha gustado
Gracias por pasarte por mi cruce(no te pierdas, que es un poco tortuoso..)
un beso ROJO

RomáN dijo...

¡Qué bello niña!
Por esos azares y caprichos del azar "bloggero" y navegando -casi naufragando- en esta blogósfera era dado con tu blog y me ha fascinado! (me he bebido tus letras por más de una hora!)
Ha sido una fortuna encontrar a una niña perdida que encuentra la sensibilidad y la poesía en sus letras (y que no puede dejar de poner el corazón al escribirlas).

Un enorme abrazo desde México niña!!

Paz dijo...

Días más tarde, la niña seguía perdida, las lágrimas ya no sabían a sal y todo a su alrededor se había teñido del rojo mayúsculo de un nombre. No había escapatoria.



[y siento dejar el optimismo tras la puerta, pero así fue como ocurrió en una historia de principio parecido]

Anónimo dijo...

Cuando los muertos nos despertemos


" Soy artista, Irene. Y no me avergüenzo de la fragilidad que quizás me acompaña. Porque soy artista innato, ves. Y nunca seré nada más que artista de todas formas.

(...)

Inventaba lo que veía con mis propios ojos a mi alrededor. Y surgiendo de las grietas de la tierra un torbellino de personas con caras de animal bajo el rostro. Mujeres y hombres, tal como les conocí en la vida misma. "

Irene dijo...

Hasta que los muertos no nos despertamos, no vemos lo irremediable, que es que nunca hemos vivido.



Con ganas de leer a Ibsen.
=)...